jueves

No esperé respuesta alguna; sabía que era totalmente innecesaria, que lo único que había buscado era activar su cerebro por un rato y lo había conseguido. Le arrebaté el cigarro de la misma manera que él lo había hecho palabras atrás y volví a sonreírle de forma burlona. Era extraño volver a pasar el rato después de tanto tiempo ¿Hacía cuánto que mi corazón se había dado de baja y había preferido anestesiar todo tipo de nostalgias? No estaba segura. A decir verdad no podía recordar mucho, sólo aquella tarde en la que me había llorado un mar de lágrimas camino a casa mientras regresaba del supermercado. Pero eso había quedado atrás… eso y tanto más. Y él estaba ahí, mirándome de reojo.

- Hace frío – dijo cortando el fluido de ideas. Se quitó la chaqueta negra y me la pasó por lo hombros. – Tenías la piel de gallina. –

- Seguirá haciendo frío de todas formas – Un doble sentido a modo de respuesta activando en los dos la sospecha de que tal vez, sólo tal vez esa reacción no estaba en lo más mínimo relacionada con los grados bajo cero que los envolvían desde el balcón.

2 comentarios: